Este viernes, hemos celebrado con todas las personas que están en nuestra casa el día de D. Bosco… desde la presentación de las grandes opciones de D. Bosco: los jóvenes, a los que quiso ya desde el hecho de serlos, en ellos veía el futuro, la posibilidad de un mundo mejor, y para ello importante educarlos desde la razón, la religión y el amor, los tres grandes pilares de su Sistema Educativo, que tenía como objetivo buscar el bien que hay en cada uno y ayudarles a sacarlo fuera para que crecieran seguros de sí mismos, agradecidos y alegres, ayudándoles a mejorar sus vidas, convirtiéndose para ellos en un padre, maestro y amigo.
Desde gestos concretos: enseñándoles un oficio, intermediando para lograr contratos adecuados a su edad y que respetara su dignidad en el trabajo, evitando así todo tipo de abuso y explotación. Y en todo ello acompañado por María Auxiliadora, a la que sentía como Madre y Maestra. Con ese espíritu de familia, de alegría, nos hemos querido hacer niños todo en la casa, y hemos jugado, celebrado la Eucaristía y compartido un rato bonito de fiesta. ¡Gracias Don Bosco, porque gracias a ti hoy estamos aquí!