La Fundación Mornese ha celebrado el 150 aniversario del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora con un encuentro “Peregrinos a Mornese”, que tuvo lugar el pasado jueves 21 de abril en la Casa Espiritual “El Pilar” en Sanlúcar la Mayor (Sevilla).
El encuentro comenzó con la bienvenida de la directora de la entidad S. Chiquinquirá Cuadrado Ponce, en la que realizó un repaso de la historia y la actualidad de la Fundación,recalcando la importancia de la atención a los niños, niñas, jóvenes y personas adultas en riesgo y/o en situación de exclusión social y a cómo en más de 20 años se ha realizado una gran trayectoria dando vida a nuevos proyectos y programas para dar respuesta a las crecientes necesidades y demandas.
Posteriormente, se realizó la oración sobre el encuentro de Jesús con los discípulos en Emaús, recordando que a Jesús lo encontramos en el prójimo y en los gestos de los demás. Se mantuvo el gesto de sembrar nuestro compromiso de querer aumentar nuestra fe, esperanza y amor de Jesús resucitado. Un gesto que invitó a todos los educadores en su compromiso de evangelización y de educación con los más vulnerables especialmente en niños y jóvenes.
Seguidamente, tuvo lugar la formación “Peregrinos a Mornese” impartida por S. María del Mar García Claro, en la que se profundizó y se hizo recorrido sobre la vida de María Mazzarello y de las primeras hermanas de Mornese, en la que aún continúa siendo fuente de agua viva y no cesa de inspirar nuestra vida de educadores.
Además, durante la jornada, se realizaron diferentes dinámicas grupales y proyección de cada realidad, en los diferentes recursos que actualmente tiene la Fundación Mornese, como son los Centros de Formación y Atención Socioeducativa y los centros residenciales de menores y mayoría de edad, en las diferentes zonas donde la entidad tiene presencia: Marbella (Málaga), Jerez de la Frontera (Cádiz), Jun (Granda) y Sevilla.
Ha sido una experiencia rica ensalesianidad, donde afianzamos nuestro compromiso de seguir peregrinando, profundizando y descubriendo,en la vida de María Mazzarello, una vida sencilla admirando el espíritu de sacrificio, valentía y superación. Continuando y asumiendo conscientemente nuestro compromiso como educadores a la luz de nuestro carisma salesiano. Sigamos compartiendo el carisma salesiano porque “Todos somos Mornese”.