DÍA MUNDIAL DE LA TUBERCULOSIS

Cada 24 de marzo se conmemora el Día Mundial de la Tuberculosis para incrementar la concientización pública sobre las devastadoras consecuencias, sociales y económicas de la tuberculosis (TB) en quienes padecen esta enfermedad prevenible y curable.  Se invita a intensificar los esfuerzos dirigidos a poner fin a la epidemia mundial de TB.

La campaña de este año se centra en acelerar el compromiso para terminar con la tuberculosis en seguimiento a la Declaración de la Reunión de Alto Nivel de Naciones Unidas sobre TB del 2018; no solo a nivel político con los jefes de estado y de gobierno sino también con gobernadores, alcaldes, parlamentarios, líderes comunitarios, personas afectadas con tuberculosis así como médicos, enfermeras y demás trabajadores de salud, organizaciones no gubernamentales, miembros de la sociedad civil, y otros socios.

¿Qué es la Tuberculosis?

Es una enfermedad causada por una bacteria conocida como bacilo de Koch. Es curable y prevenible. Afecta principalmente a los pulmones, pero puede afectar otras partes del cuerpo. Si no se trata oportunamente, puede causar daño permanente en los pulmones.

Las personas infectadas con el bacilo tuberculoso tienen un 10% de probabilidades de enfermar de tuberculosis a lo largo de la vida. Sin embargo, este riesgo es mucho mayor para las personas cuyo sistema inmunológico está dañado, como ocurre en casos de la infección por el VIH, malnutrición o diabetes, o en quienes consumen tabaco. La tuberculosis es la principal causa de muerte entre las personas con VIH.

Se calcula que una tercera parte de la población mundial tiene tuberculosis latente. Es decir que están infectadas por el bacilo, pero aún no han enfermado ni pueden transmitir la infección.

¿Cómo se transmite?

Una persona con tuberculosis, que no esté en tratamiento, puede contagiar a otras personas al estornudar, toser o escupir. Al hacerlo, elimina bacterias al aire que pueden entrar a los pulmones de otras personas. Alcanza con que una persona inhale unos pocos bacilos para quedar infectada.

Cuando la persona enferma se encuentra haciendo tratamiento no contagia a otras personas. La tuberculosis no se contagia por compartir el mate, cubiertos, vasos, etc. con una persona enferma.

A lo largo de un año, una persona con tuberculosis puede infectar a unas 10 a 15 personas por contacto cercano. Si no reciben el tratamiento adecuado, hasta dos terceras partes de las personas con tuberculosis mueren.

¿Cuáles son sus síntomas?

La tos persistente por más de 15 días es el principal síntoma. Se puede presentar junto a fiebre, sudoración por la noche, cansancio permanente, pérdida de peso o falta de apetito. Sin embargo, pueden ser leves durante muchos meses. Es por esto que las personas pueden tardar en consultar al servicio de salud y transmiten la bacteria a otras personas. Ante la persistencia de tos durante más de 15 días, es importante consultar en un servicio de salud.

¿Como prevenir la tuberculosis?

La más efectiva forma de prevención de la tuberculosis es el diagnóstico precoz y el tratamiento con esquemas terapéuticos adecuados de todos los casos, para cortar la cadena de transmisión.

Se deben realizar pruebas a los contactos de las personas enfermas para comprobar si se han infectado o no. La vacunación tiene gran importancia para prevenir las formas progresivas y graves de la enfermedad, principalmente la meningitis tuberculosa y la tuberculosis miliar.

Medidas para reducir la transmisión de la tuberculosis en nuestra comunidad.

  • Frecuente lavado de manos con agua y jabón.
  • Cubrir la boca y la nariz con un pañuelo desechable o papel higiénico al
  • toser o estornudar.
  • Use mascarillas cuando tenga tos y evite las multitudes.
  • Dejar entrar la luz del sol en habitaciones porque los bacilos de la
  • tuberculosis no sobreviven a la luz solar.
  • El papel o pañuelo debe botarse al cesto de la basura después de su uso.
  • El personal de salud y familiares de la persona con tuberculosis podrán
  • usar también mascarillas especiales (N95) para prevenir la tuberculosis.
  • Abrir puertas y ventanas para tener una adecuada ventilación natural.